Pitahaya orgánica para exportación
Pitahaya orgánica (Hylocereus spp.)
Introducción
La pitahaya pertenece a la familia Cactáceae. Es una
planta perenne que crece de forma silvestre sobre árboles vivos, troncos secos,
piedras y muros. Su centro de origen parece ser de América central y el caribe,
las especies más cultivadas son Hylocereus undatus y Hylocereus megalanthus.
El cultivo de la pitahaya requiere de factores
ambientales especiales, esta se puede desarrollar en sectores específicos de
Ecuador ya que le proporcionan características edáficas y climáticas ideales
que inciden directamente en la calidad de la fruta. Este cultivo exige un clima
sub cálido húmedo, temperatura ambiente, una humedad relativa que supere el 50
% y una formación ecológica de bosque húmedo montano bajo.
La pitahaya es una planta suculenta, con muchas
espinas y se adapta bien a zonas de baja a mediana precipitación. La pitahaya
se usa para preparar ensaladas agridulces en comidas gourmet. Además, se pueden
elaborar batidos, jugos y postres con la fruta, pues su sabor es muy dulce, por
eso es consumida directamente.
La pitahaya de exportación en el Ecuador se produce en
las provincias de Morona Santiago y Pastaza, en la Amazonía ecuatoriana, y en
Pichincha, en la Sierra del país. Además existen otras provincias que se están
sumando a este proyecto de exportación aunque en pequeñas extensiones.
Selección y
preparación del terreno
La vegetación es un indicador para saber si un terreno
es adecuado para establecer una parcela de pitahaya. Se debe seleccionar un
área donde la vegetación se vea bien desarrollada y con abundantes árboles y
arbustos. El siguiente paso es la eliminación de hierbas y arbustos pequeños,
usualmente se realiza con machete, esta actividad se conoce como “chapia” y se
recomienda realizarlo entre los meses de enero a marzo.
Después de la chapia se cortan las partes superiores
de los árboles o arbustos que han sido seleccionados para servir como
estructura de soporte (denominados “tutores”) para las plantas trepadoras de
pitahaya, los tutores deben quedar a una altura de 1.0 a 1.20 metros, el
propósito es lograr tutores de tamaño adecuado, que faciliten su poda, así como
las labores de cosecha y la poda de las pitahayas, entre otras actividades.
Marzo y abril son los meses más convenientes para la selección y conformación
de los tutores.
Entre los mejores tutores se encuentran: el Chakah [Bursera
simaruba (L.); el Dzalam [Lysiloma latisiliquum (L.); el Jabín [Piscidia
piscipula (L.) Sarg]; el Kitanche [Caesalpinia gaumeri (Britton &
Rose) Greenm]; y el Kopo’[Ficus cotinifolia H. B. y K.], siendo a su
principal virtud, de acuerdo a los productores, es que no mueren a pesar de las
podas severas que reciben.
Especies y tipos de pitahaya
Existen en el mundo muchos tipos de pitahaya, al menos
18 especies se han clasificado en el género Hylocereus. En la Provincia
de Los Ríos, Cantón Quevedo se cultivan dos tipos de pitahaya, siendo el más
abundante el de cascara amarilla y pulpa blanca (Hylocereus triangularis).
El segundo tipo es el de cáscara rojiza y pulpa blanca (Hylocereus undatus
(Haworth) Britton & Rose).
Época de siembra
La mejor época
para establecer las plantas de pitahaya en el campo es cuando las lluvias son
abundantes.
Método de siembra
La pitahaya se propaga por medio de tallos (estos
pedazos de tallo también reciben el nombre de esquejes) de 30 a 50 cm; sin
embrago, mientras más largo son los esquejes, el crecimiento de las plantas es
más rápido. Los esquejes no deben ser ni muy viejos ni muy jóvenes. Los
esquejes se dejan cicatrizar por una semana bajo sombra y después se excava un
hoyo de 5 a 10 cm, en la base del tutor, para enterrar la base del tallo. Para
favorecer que al menos un retoño de pitahaya se adhiera al tronco del tutor, el
esqueje se ata al tutor con pedazos de plantas fibrosas o con un cordel.
Densidad de siembra
Puesto que se usan como tutores los árboles y arbustos
que ya existían en el terreno seleccionado, la distancia entre ellos es
irregular, pero se sugiere dejar una distancia de 3 a 4 m entre tutores,
seleccionando los mejores y eliminando aquellos que se encuentren muy próximos;
de esta manera, se logra una densidad de alrededor de 1200 plantas por
hectárea.
Es recomendable también utilizar tutores de materiales
resistentes como el cemento los cuales permiten un mayor soporte de las plantas
para evitar que estas se caigan produciéndose como consecuencia la eliminación
de una unidad productiva.
Nutrición de las plantas
La mejor forma de lograr una buena fertilidad del
suelo es dejar alrededor del tutor las plantas deshierbadas y cortar en trozos
pequeños las ramas podadas de los tutores. Adicionalmente, dependiendo del
tamaño de la planta, se debe aplicar a pie de la pitahaya 300 a 500 g de ceniza
de leña, un mes antes del inicio de la producción; una segunda aplicación se
efectúa a mitad del período de producción y una tercera se hace al final de la
producción. En caso de no tener ceniza, se puede aplicar el carboxy® K (Fig. 4)
al inicio y a la mitad del periodo de producción de frutos; se disuelven 4
litros de karboxy® K en 200 litros de agua y se aplica cada mes durante la
fructificación.
También se debe asperjar un biofertilizante a base de
estiércol; este biofertilizante se asperja a los tallos de pitahaya cada 10
días, muy temprano o en las tardes, cuando la temperatura ambiental es baja;
pero no se debe aplicar cerca de la cosecha o durante la cosecha, en caso de
observar poco crecimiento de ramas nuevas, se puede aplicar al suelo gallinaza,
200 gramos si son plantas chicas y 400 gramos si las plantas son grandes.
Es importante considerar que las casas certificadoras
no aceptan el empleo de la gallinaza. Para prevenir una rápida filtración de
los nutrientes que contiene la gallinaza (una enmienda disponible en las
comunidades rurales) debe ser revuelta con materia orgánica fresca (hojarasca)
y/o con tierra roja. Una segunda forma de nutrición orgánica para la pitahaya
es mediante el empleo de productos comerciales.
En este caso se recomienda aplicar la mezcla de tres
litros por hectárea de los biofertilizantes Nutri promix, Nutripro Extra Alga,
Nutripro Forte, Aminofir Xtra y Progranic Mega; se aplica alrededor de la
planta tres veces a intervalo mensual durante la época de producción. Con esto
es factible producir 8 toneladas por hectárea.
En la finca Ave Fenix utilizan los rechazos que quedan
(tallos cosechados) para elaborar su propio abono orgánico, dichos tallos una
vez cosechados son repicados en una maquina picadora para luego junto con otros
materiales sean incorporados al suelo; los demás materiales empleados en esta
finca para preparar el abono son aserrín, residuos de carbón, Dioxil y Solita.
Labores de cultivo
Durante el período de lluvias se efectúan dos podas de
formación de los tutores, comúnmente se realiza en junio-julio y octubre noviembre.
La idea es eliminar el exceso de sombra, incluso se pueden eliminar todas las
ramas que dan sombra, pero dejar un 30-40% de sombra es ideal para el buen
desarrollo de la pitahaya y los tutores, sobre todo cuando se aproxima la época
de sequía. Las podas también permiten mantener el tutor a una altura adecuada
para la cosecha y otras actividades.
Mientras los tallos de pitahaya se encuentran en
crecimiento, es importante guiarlos para que se adhieran al tutor mediante las
raíces aéreas que desarrollan; si es necesario, los tallos se amarran al tronco
del tutor mientras la planta no se fija por si sola. Otra actividad, es la
conformación de las plantas de pitahaya, que consiste en la eliminación de los
tallos que salen muy próximos al suelo o aquellos que pueden romperse por no
tener un punto de apoyo en el tutor. En adición, después de la cosecha se
eliminan los tallos muy viejos.
Manejo fitosanitario
-Control de arvenses (hierbas)
Se realizan 3 deshierbes, con machete: 1) febrero-marzo,
2) junio-julio y 3) septiembre-noviembre. En la finca Ave Fenix este control se
lo realiza a través de motoguadaña 3 veces al año debido a que esta finca
cuenta con riego y esto provoca que las malezas crezcan con mayor rapidez.
Prevención y control de plagas
La plaga principal es un barrenador (Alberada
bidentella Dyar, que afecta tallos, flores y frutos en algunos años a
provocado pérdidas de hasta el 40% de los frutos. Para controlar el barrenador
se debe sacar de la parcela los tallos, flores y frutos infestados y conviene
quemarlos. Si la infestación persiste se sugiere asperjar productos orgánicos a
base de “Nim”. La otra opción es usar insecticidas orgánicos comerciales, tales
como el cinna-mix®, 600 mililitros de cinna-mix® se mezclan en 200 litros de
agua y se asperja cada semana. Otro insecticida comercial es PROBAC® BT, a base
de una bacteria conocida como Bacillus thuringiensis Berliner; las bacterias
matan las larvas del barrenador; un litro de PROBAC® BT se disuelve en 200 litros
de agua y se asperja a las plantas cuando las larvas se detectan.
Cave recalcar que en la Finca Ave Fénix la utilización
de productos comerciales organicos es moderadamente baja ya que ellos realizan
trampas para determinar si la infestación es alta para usar los productos
mencionados anteriormente, ellos han hecho algunos tipos de ensayos y se han
dado cuenta que al tener la maleza bajo los 0.50 cm los ataques por parte de
insectos se reducen o casi son nulos por esto ellos revisan las trampas y
realzan continuamente control de arvenses.
Prevención y control de enfermedades
La enfermedad más común en la región, originada por un
hongo, es el “ojo de pescado”, se presenta principalmente en la época de
sequía, cuando las plantas sufren por falta de agua y exceso de sol; el hongo
es probablemente la especie Botryosphaeria dothidea (Moug) Ces & De Not. Su
control requiere la poda de los tallos enfermos, así como sacar éstos de la
parcela para quemarlos. Cuando la enfermedad es severa, después de podar los
tallos enfermos, se sugiere asperjar las plantas de pitahaya con caldo sulfocálcico.
Otra enfermedad, causada por una bacteria,
aparentemente la especie Pectobacterium carotovorum subsp. carotovoum syn.
Erwinia carotovora subsp. carotovora, causa una pudrición blanda en los
tallos, se presenta en la época de lluvia, cuando la humedad ambiental es alta,
lo mismo que la temperatura. No se conoce ningún producto para controlar la
enfermedad; por consiguiente, lo único que se puede hacer es podar los tallos
enfermos y sacarlos de la plantación para quemarlos.
La mejor forma de controlar ésta y otras enfermedades
es mediante una nutrición equilibrada de la pitahaya. El riesgo de plagas es
mayor en zonas con alta producción de pitahaya por lo que se recomienda
mantener la vegetación nativa alrededor de la parcela.
En la finca Ave Fénix han encontrado ataques de los
que ellos asumen es un hongo causando daños en los tallos de esta fruta como la
pudrición de estos tallos, ellos han determinado que una vez que el tallos es
infectado no se replica hacia otro tallo de la misma planta e incluso mencionan
que preparando una mezcla de agua con deja y bañando totalmente a la planta se
reduce o se elimina en parte el ataque de este hongo.
Cosecha
La pitahaya puede producir algunos frutos un año
después de haber sido plantada y cada año aumenta la cantidad de frutos
desarrollados, hasta el cuarto o quinto año que es cuando la producción se
estabiliza. Dependiendo de las lluvias, la cosecha puede efectuarse desde
principios de junio hasta octubre. La producción por hectárea, en una parcela
con 1200 plantas de pitahaya, es de 8 toneladas en plantas nutridas con ceniza
y bio-fertilizantes a base de estiércol, la producción es más alta si se aplica
la pollinaza. La cosecha se realiza cuando los frutos inician el cambio de
coloración, es conveniente usar tijeras para cortar el fruto con un pedazo de
tallo el cual debe hacerse un corte en “V” para evitar daños en el fruto,
teniendo cuidado de no cortar el haz vascular o “vena”.
Bibliofrafia
Cálix, Hector. (Junio,
2013). FOLLETO TÉCNICO PARA LA PRODUCCIÓN ORGÁNICA DE PITAHAYA. Universidad de
Quintana Roo. Mexico. 9-pag.
EL COMERCIO. (2019). Recuperado de: https://www.elcomercio.com/actualidad/ecuador-exportacion-pitahaya-organica-eeuu.html.
Parte de la entrevista realizada con Geovanny Aguilar, administrador de la finca de Pitahaya
Trampas para captura de insectos, colocadas por Agrocalidad
Injerto de pithaya amarilla con pitahaya Productos orgánicos usados en la finca
roja
Dioxil antes de ser incorporado como abono
Dioxil y Solita almacenados en bodega
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